La presidenta designada de Perú, Dina Boluarte, inició este sábado un recorrido por áreas ubicadas en el litoral norte del país para atender la emergencia generada por las fuertes lluvias, inundaciones y deslizamientos que provoca el ciclón Yaku, y reconoció que el país no dispone de los medios necesarios para hacer frente a esta situación.

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Durante esta jornada se oficializó la declaración del estado de emergencia desde la región de Tumbes (norte) hasta Lima, la capital. La medida también comprende a las regiones de Piura, Lambayeque y La Libertad, en el norte del litoral peruano.

Desde Tumbes, Boluarte reconoció que el Estado no tiene las condiciones necesarias para afrontar las fuertes lluvias. Señaló que “a través del Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci) advertimos hace varias semanas que este fenómeno natural iba a afectar al norte del país. Gobernadores y los alcaldes no tenían cómo afrontar de manera inmediata y, hay que decir la verdad, el Estado tampoco”.

Expresó: “No tenemos maquinaria, no tenemos motobombas. No tenemos cómo afrontar estas lluvias naturales”. Señaló que su Gobierno está trabajando para que cada municipio pueda disponer en el futuro de maquinaria adecuada para afrontar una crisis de este tipo y luego reconstruir puentes y carreteras.

Debido a la emergencia, el ministro de Educación, Óscar Becerra, anunció que se postergó el inicio escolar en los colegios públicos en Lima, Tumbes, Piura y Lambayeque, que estaba previsto para el lunes próximo. Horas después autoridades de la región de Áncash también asumieron esta medida preventiva.

El funcionario precisó que “no vamos a empezar el 20 (de marzo), sino más adelante”, y recordó que por norma las instituciones educativas tienen que estar diseñadas para servir de albergue en caso de catástrofes.

Hasta el momento el ciclón provocó el fallecimiento de seis personas. Su centro está ubicado a 600 km mar adentro, frente al litoral norte, y se mueve en dirección sur.

El Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi) advirtió que el ciclón trae asociadas lluvias, caída de nieve y granizo y una elevada carga de humedad, lo cual dará lugar a precipitaciones inusuales.

En el caso de la capital, la agencia advirtió que la intensidad de las lluvias podría ser cinco veces mayor de lo habitual para esta época del año y que “hasta el 14 de marzo se presentarán lluvias de moderada a extrema intensidad en la costa”.

El presidente de Senamhi, Guillermo Baigorria, señaló que Lima no está preparada para las lluvias que se estima que ocurrirán. Explicó que la urbe tiene “los techos planos y ante precipitaciones altas, muy violentas, acumuladas, el agua se transforma en peso y, muchas veces, la estructura del techo no soporta porque no está diseñada para eso o para escurrir… Entonces, definitivamente, se producen los colapsos de estructuras”.

Por su parte, el Centro Nacional de Estimación, Prevención y Reducción al Riesgo de Desastres (Cenepred) dio a conocer que 592 distritos de la costa norte y de la sierra presentan alto riesgo de verse afectados por deslizamientos, huaicos (aluviones) y otros movimientos de masas provocados por las intensas lluvias.

El Centro de Operaciones de Emergencia Nacional (COEN) señaló que 34 puertos en todo el litoral permanecen cerrados ante la presencia de oleajes de ligera y moderada intensidad.

Entre otros daños, se reportan persistentes lluvias e inundaciones en la ciudad balneario de Pacasmayo, en la región de La Libertad, así como el colapso de un puente en la localidad de Sechín, en la provincia de Áncash.

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